La Agenda 2030, un instrumento necesario
Desde su aprobación por parte de la Asamblea de Naciones Unidas, se han vivido una serie de acontecimientos que han hecho que la Agenda 2030 cobre una especial relevancia. Surgida para promover una serie de Objetivos de Desarrollo Sostenible, este instrumento se ha ido haciendo fuerte en un contexto en el que han aumentado los fenómenos meteorológicos extremos, las desigualdades e, incluso, ha aparecido una pandemia mundial.
A pesar de ser concebida como una herramienta útil, parte de la opinión pública la consideró un proyecto utópico, cuando no un simple mecanismo de lavado de cara. Pero, realmente, la Agenda 2030 es un instrumento global para alcanzar un futuro inclusivo y sostenible; y cada vez es más frecuente que tanto las administraciones como las empresas y la propia ciudadanía lo vean así.
La emergencia climática y las desigualdades sociales son protagonistas en el debate público en muchos países. En parte, gracias a la relevancia que ha adquirido la movilización de los jóvenes a favor de la ecología a través de nuevas figuras de renombre y movimientos transnacionales, pero también gracias a la evidencia científica y sociológica; pocos son los que se atreven ya a ignorar estos retos.
La Agenda 2030 no persigue muchos objetivos nuevos, pero sí lo hace de una forma novedosa. Tras el modesto y relativo éxito de los Objetivos del Milenio, este instrumento de la ONU surgió con la firme convicción de que, para buscar resultados diferentes , se debe actual de forma distinta. En este caso, la clave reside en la colaboración de todos: administraciones, instituciones, empresas y personas trabajando en la misma dirección.
La actuación transversal y la colaboración son los mejores mecanismos para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Tenemos una década por delante para lograrlo y por eso, en Rivera, estamos comprometidos con los ODS por un futuro mejor para todas las personas.
¿Cómo lo hacemos? Principalmente, desde tres perspectivas:
1) Los servicios que ofrecemos.
Etiquetados con el Ecolabel for Indoor Cleaning de la Unión Europea, se realizan minimizando el consumo de agua y energía, tratando de forma adecuada los residuos y reduciendo al máximo posible el impacto ambiental. Además, todos los protocolos están enfocados en mejorar la salud y bienestar de las personas.
2) Las actividades que llevamos a cabo de manera interna.
Todos los procesos y tareas internas siguen la máxima de reducción, reutilización y reciclaje, tenemos planes de transporte sostenible y tienen un marcado carácter ECO Friendly. También cuidamos de las personas de la organización y los colaboradores para que desarrollen todo su potencial profesional y alcancen el mayor grado de satisfacción personal.
3) Responsabilidad Social Corporativa.
Aparte de estar involucrados en nuestra comunidad por medio de actividades económicas, sociales y deportivas, difundimos y promovemos los Objetivos de Desarrollo Sostenible para involucrar a más personas en su consecución.
Y tu empresa, ¿qué puede hacer por la Agenda 2030 y los ODS? Descúbrelo aquí.